25/07: Skrúöur - Grundarfjöröur

Hoy toca mucho coche otra vez. Es el día más duro.
Salimos algo más tarde de las 9h. Hacemos más de 200 km por carretera de tierra, por suerte la mayor parte está bastante bien.
A medio camino hemos parado a ver la cascada Dynjandifoss en  Borgarfjörður. Es muy bonita, de las que más me han gustado del viaje, baja el agua haciendo la cascada muy ancha, como una cola de caballo.
Los otros 200km ya son de asfalto y se llevan mejor. Cómo no hemos parado a las 16h ya habíamos llegado al albergue. Por dentro es muy moderno y muy nuevo, aunque por fuera parece un edificio pre fabricado, pero es que són asi los de aquí.
Podíamos haber cogido un ferry y nos hubiéramos ahorrado mucha carretera pero era demasiado caro y hemos preferido ver el paisaje.
Antes de llegar a Grundarfjöröur, se cruza el campo de lava Berserkjahraun que había leído que era espectacular y la verdad que sí lo era. Esta zona es muy montañosa y los paisajes són más bonitos.
Esta noche nos hemos propuesto salir a cenar un buen pescado. Después de dar varias vueltas por el pueblo y preguntar varias veces al final hemos averiguado que para comer pescado hay que ir a un hotel. Hemos acabado entrando a un hotel muy pijo. Hemos pedido el pescado del día porque creíamos que era el más fresco, había bacalao y estaba riquísimo, se desacía en la boca. Ha valido la pena pagar los 40€. El otro plato era salmón pero es posible que no fuera de aquí y no fuera tan fresco.
Hoy nos acostamos pronto que mañana es el último día que me pego la paliza de coche, pasado nos llevan en un 4x4.

24/07: Albergue de Osar – Korpudalur

Hoy todo es carretera. Hacemos 427 km.
Al salir del albergue visitamos la roca Hvítserkur que hay dentro del mar que no fuimos el día anterior por el mal tiempo.
Luego fuimos a ver la colina de basalto de Borgarvirki, fue una antigua fortaleza. Es una zona que hace mucho frío y aire, por lo que estamos lo justo.
Seguimos la ruta pasando por la garganta Kolugljufur.
A poco de llegar a nuestro siguiente alojamiento en Korpudalur, paramos a visitar el centro del zorro polar en Súðavík. Tenían dos zorros en una jaula en el jardín y curiosamente es la zona de Islandia que más calor hace.
Antes de llegar a Korpudalur hay un túnel de 6km que impresiona mucho, es de un sólo carril, hay zonas marcadas con una M que es por si viene otro vehículo que te apartes y pueda pasar. Además dentro del túnel hay un desvío para salir por otro lado de la montaña, por suerte cogimos el adecuado, no lo esperábamos y no sabíamos el nombre del pueblo al que íbamos.
Llegamos al alojamiento que está un poco escondido, nos está yendo muy bien el gps. Es una casa que alquilan habitaciones, es un albergue, está muy limpio y la mujer que lo lleva es muy agradable, hoy descansaremos que mañana hay que conducir bastante.
Nos ha gustado mucho esta zona. Nos habían dicho que no era nada bonito, las otras zonas de los días anteriores nos hacía mal tiempo y no disfrutamos de los paisajes. Esta zona lo que tiene que no hay cosas para visitar pero los paisajes nos gustan más, es posible que por que nos hace mejor tiempo.

23/07: Akureyri – Blönduós – Albergue de Osar

Hoy salimos pronto del albergue. Tenemos que hacer muchos kilómetros.
Primero cruzamos el valle Öxnadalur, hace muy mal tiempo, lluvia y niebla.
Nos desviamos del camino y subimos a visitar Hólar, es un pequeño pueblo que fue una de las dos diócesis del país en el siglo XI, tiene la iglesia de piedra más antigua de Islandia. Se pueden ver varias casas antiguas, nos ha gustado más de lo esperábamos.
Seguimos a nuestro siguiente alojamiento por la costa Vatnsnes. Esta vez íbamos a un albergue que recomendaban muy bien,  el albergue Ósar. Nos tocó una casita que tenia tres habitaciones, la nuestra era una para los dos. Al llegar llovía mucho, aprovechamos para hacer una lavadora y mientras fuimos a ver una zona de playa que hay focas, están en la otra orilla pero está cerca.
Nos acostamos pronto, que nos quedan unos días de muchos kilómetros, estamos haciendo de 300 a 400 km al día.

22/07: Akureyri - Húsavík – Mývatn – Krafla – Akureyri

Como estábamos de Guest House y la habitación estaba bien hemos aprovechado para dormir más rato, teníamos desayuno incluido, ya tocaba uno en condiciones.
Hoy al no tener que ir a ver las ballenas cambiamos el orden de la ruta, primero paramos a visitar la cascada Goðafoss, es muy bonita.
Seguimos visitando los pseudocráteres de Skútustaðagígar.
Luego hemos ido a ver una zona llena de lava, las estructuras de lava únicas de Dimmuborgir. Hay una en concreto que le llaman Iglésia por la forma curva que tiene.
Luego subimos una pequeña colina, Höfði y nos hacemos un bocadillo arriba para comer disfrutando de las vistas.
Por último visitamos las solfaratas Leirhnjúkur. Es una zona de salidas de vapor del suelo y es muy bonita de ver por el contraste de colores vivos.
Finalmente vamos al siguiente alojamiento que es el que estuvimos la noche anterior por error, al menos resulta fácil de localizar.
Hoy nos acostaremos pronto porque estamos cansados, ya llevamos más de 2.000 km de viaje.

21/07: Seyðisfjörður – Jökulsárgljúfur – Akureyri

Nos levantamos pronto y cruzamos de nuevo el puerto de montaña con niebla densa.
Después de unos 180km llegamos a una especie de cañón que está en una zona que parece desértica y visitamos las cascadas Dettifoss y Selfoss.
Luego la idea era hacer un trekking, pero visto que el paisaje era todo lo mismo ya que es muy plano, lo acabamos descartando.
Decidimos ir hacia Húsavík y mirar de hacer el avistamiento de ballenas.
Llegamos a Húsavík por ahí las 15h y vamos a consultar los horarios, acabamos reservando para las 16:30h. Cogemos el tour completo que nos lleva a la isla de los frailecillos. Antes de coger el barco vamos a comer una sopa de pescado que está muy buena, el sitio es curioso, pagas y te la sirves tú del cazo que hay al lado de la barra. Yo acabo probando una especie de tarta que hacen por aquí.
Cogemos el barco todo emocionados, nos ponen unos trajes impermeables y salva vidas y nos advierten de que hace muy mala mar. Decidimos seguir. Partimos con el barco y primero visotamos la isla de los frailecillos. Es gracioso porque se ven ir hacia la isla con peces en el pico para llevar a las crías y otros que salen de la isla a por más peces. Són pequeños y muy rápidos, por lo que cuesta hacerles fotos. Seguidamente vamos a ver si vemos ballenas, al poco rato nos pasa una justo al lado y la vemos perfectamente. Seguimos más rato por la zona y vemos más pero sólo el lomo y la cola. Quedamos contentos, pero es muy pesado el trayecto de 4h. Encima a la vuelta se nos puso a llover y se hizo muy larga.
Al bajar del barco decidimos ir hacia el siguiente alojamiento. Tenía mal marcado el alojamiento en la hoja de ruta, porque sólo tenía las coordenadas y al final me lie con el del día siguiente y nos plantamos en ese. Tuvimos que preguntar en una gasolinera y se ve que ni salía en los mapas y nos lo enseñó en una guía de las que vendían. Tuvimos que regresar 30 km, pero lo encontramos fácilmente.

20/07: Seyðisfjörður - Lagarfljót - Seyðisfjörður

Hemos dormido bastante bien esta noche.  En esta zona hace mas frío y va mejor el saco.  Dedicamos la mañana para ver Skálanes. Es un bonito centro rural con más de 40 especies de aves.  Para llegar hay que hacer 13km en coche hasta el rio y 4km andando.
A la vuelta, ya al medio día vamos a dar la vuelta en coche al lago Lagarfljót. En la parte sur del lago hay un par de cascadas, hay que hacer un camino de 2km bordeando el río. Al llegar a las cascadas está lloviendo, nos hacemos un bocadillo, comemos en el coche, nos ponemos la ropa de lluvia y empezamos la ascensión con algo de lluvia. Por suerte a medio camino deja de llover. La primera cascada,Lítlanesfoss, está en una montaña con formaciones de columnas que són formadas por la lava cuando se va enfriando lentamente con el paso de los años.
Más arriba está la cascada Hengifoss que para mi no es tan bonita cómo la primera, aunque es más grande.
Por desgracia, aún y habiendo hecho los más de 100 km del lago Lagarfljót, no hemos podido ver el monstruo que dicen que habita en el.
A la vuelta vamos a tomar un café y te al mismo lugar que el día anterior, es un bar muy acogedor. Vemos que los de al lado se piden una especie de panecillo con salmón ahumado, lechuga, tomate...  y nos pedimos uno para los dos, estaba muy bueno.
A media tarde volvemos al alojamiento y nos pilla una niebla muy densa en el puerto de montaña. Nos toca recorrer el camino despacio y con mucho cuidado.
Hoy nos acostaremos pronto que mañana nos daremos una buena paliza de trayecto

19/07: Berunes – Seyðisfjörður

Ha sido la noche que mejor hemos dormido, nos levantamos habiendo dormido bien y sin dolor de espalda.
Hoy cómo vamos muy bien de tiempo cambiamos de planes y en vez de subir a Seyðisfjörður por el interior subimos bordeando los fiordos del este. Hoy nos apetece comer algo de pescado, en un pueblo preguntamos de algún sitio y nos miran extrañados, sólo hay pizzerias y el grill que són parecidos al Mcdonalds pero los sirven en la gasolinera.
Al final desistimos, porque no es plan pagar por una pizza que. lo más seguro que ni nos guste. Nos hacemos un bocadillo de paté de salmón y al menos nos quitamos las ganas de pescado.
Llegamos a Seyðisfjörður, tenemos un albergue con habitación para seis, pero está muy bien.
Nos damos un paseo por el pueblo que está en una cala. Es una zona que está entre montañas, para llegar a este pueblo hay que cruzar un puerto de montaña bastante alto